Un brothel
sería un prostíbulo. Justamente allí,
en Nevada, moría Ringo Bonavena,
nuestro campeón de boxeo, en 1976. Y allí, en los Estados Unidos, muchos dueños de prostíbulos, o las prostitutas,
son mostrados como celebrities, casi como héroes o heroínas. También en East
of Eden, la novela de John
Steinbeck, la madre de Cal
trabajaba en un brothel.
Averiguamos sobre el significado de brothel, la historia y sus
sinónimos. También pusimos un cuadro de Toulouse-Lautrec,
que parecía tener una obsesión con los
cabarets.
En un video corto podemos ver a una señora hablando
de su experiencia en el medio. Ella fue madam
en un brothel en Manchester. ¡Interesante!
¿Qué es?
A brothel,
bordello, ranch, or whorehouse es
un lugar donde la gente tiene actividades
sexuales con prostitutas.
Sin embargo, por razones culturales o legales, estos establecimientos frecuentemente se describen como: massage parlors, bars, strip clubs, body rub parlours, o studios.
Prostíbulo en San Francisco, 1870 |
En los Estados Unidos
Se estimó que, entre 1911 y 1913, aproximadamente 100.000 mujeres estaban trabajando en brothels.
A finales del siglo 19 los brothels en los Estados
Unidos no eran secretos. Alguien expresó su creciente preocupación sobre el
negocio del sexo organizado en norteamérica, diciendo que “la prostitución se había convertido en un
negocio altamente comercializado”.
Se referían a los brothels como disorderly houses y sus residentes con algunos eufemismos como abandoned woman, bawd good-time daisy, fallen
angel, fille de joie, jeweled bird, lady of the evening, shady lady, soiled dove, wanton woman, and woman of the town y otros menos amables
como hooker, slut, y whore.
Al avanzar el siglo 19 la prostitución como profesión se hizo más común. Muchas prostitutas todavía practicaban su
profesión independientemente, pero la nueva clase de prostitutas creó una demanda por un lugar para practicar su
actividad, y los brothels
sirvieron a este propósito.
Los visitantes podían fácilmente encontrar estos
lugares abriendo los directorios locales, tal como el Travelers' Guide of Colorado, de 1895. Se leía:
"Twenty young ladies engaged nightly to
entertain guest"
Una autoridad del siglo 19 describe a la ciudad de Nueva Orleans como:
“La prostitución aquí es verdaderamente asombrosa sin duda y sin paralelo en el mundo civilizado. La práctica es tan generalizada que los hombres no buscan tapar sus actos.”
The Medical Inspection, Toulouse-Lautrec |
En un brothel
La casa promedio tenía entre cinco y veinte chicas trabajando, algunos de los más lujosos hasta
tenían sirvientes, músicos y guardias. Típicamente contenía varias
habitaciones, todas amobladas. Algunos brothels
eran mucho más grandes. El que poseía Mary
Ann Hall, en Arlington, Virginia; se describía:
“Una casa majestuosa con veinticinco habitaciones.
El interior estaba elegantemente amoblado. Las habitaciones principales en el
primer piso contenían grandes cuadros al óleo, alfombras de Bruselas, y
numerosos ítems de plata. Las habitaciones poseían botellas de champagne,
perfumes, porcelanas de alta calidad, comidas exóticas, para atraer a clientes
ricos.”
Las mujeres
Las mujeres en los brothels provenían de diferentes sectores de la vida. La prostituta promedio tenía
aproximadamente 21, pero muchas eran tan chicas como de 13 y otras tan viejas
como de 50. Pensados como un escape para las
jóvenes mujeres los brothels
algunas veces atraían a quiénes menos se esperaba. Las cantantes eran atraídas por el interés del dinero y la
diversión. Otras llegaban allí para escapar a sus aburridas vidas. Aunque de
diferentes clases, etnicidad y edades la mayoría de las mujeres que empezaban en un brothel
compartían un mismo objetivo: el dinero rápido. Algunas se encontraban siempre
en deuda con su madam. Su falta de
crédito hacía a las prostitutas
incapaces de comprar las cosas necesarias para su negocio y eran forzadas a
comprarlas a través de la madam.
La Madam
Algunas madams,
frecuentemente ellas mismas prostitutas, se convirtieron en independientes y
millonarias. Una de ellas fue Mary Ann
Hall de Arlington, Virginia. Mary Ann compró un lote y construyó una
casa. Esa sería la localización para su prostíbulo por los siguientes 40 años.
Su brothel era lucrativo y Mary Ann pudo comprar múltiples esclavos y una casa de verano.
Era responsable por el comportamiento de sus
mujeres lo que era todo un desafío ya que el abuso de drogas era común.
Mucha atención de las madams se ponía en mantener sus negocios discretos, que lograban a
través de contribuciones en dinero a organizaciones de caridad.
Mucha de la ganancia iba a gastos legales ya que la prostitución era ilegal en su mayor
parte. Los pagos a término garantizaban que el negocio continuara sin ser
cerrado.
La madam
tenía que controlar la limpieza, incluyendo las sábanas, que tenían que ser
cambiadas varias veces durante la noche; y verificar el stock de vinos y
licores para los clientes.
Se necesitaban nuevas caras por lo que las madams tenían que reclutar nuevas mujeres. La nueva prostituta recibía entrenamiento, cosméticos y ropas de la madam.
Las disorderly
houses usadas para vender sexo a principios del siglo 20 fueron ilegales
con algunas excepciones: Arkansas,
Kentucky, Louisiana, New Mexico, y Carolina del Sur.
De
la web
Vivien
Ella Walden habla sobre su experiencia de ser una Madam en un brothel en Manchester:
“I was born a rebellious child. It was in me from a very young age and I didn´t want to follow through within the pattern of how it was then with Jewish religión...”
The Madam Spilling the Secrets of
the Brothel
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