Middlemarch

 Middlemarch, A Study of Provincial Life es una novela de la inglesa Mary Anne Evans, quien escribió como George Eliot.

Middlemarch apareció en ocho entregas entre 1871 y 1872. Ambientada en Middlemarch, una ciudad ficticia de Inglaterra, sigue historias distintas, que se entrecruzan con muchos personajes. Los problemas incluyen el estatus de la mujer, la naturaleza del matrimonio, el idealismo, el interés propio, la religión, la hipocresía, la reforma política y la educación.

A pesar de los elementos cómicos, Middlemarch utiliza el realismo para abarcar eventos históricos: la Ley de Reforma de 1832, los primeros ferrocarriles y el ascenso del rey Guillermo IV. Analiza la medicina de la época y los puntos de vista reaccionarios en una comunidad asentada que enfrenta cambios no deseados.

Abajo incluimos un pequeño argumento de la historia (siempre es recomendable leerla) y las opiniones de autores y personalidades (como Henry James, Florence Nightingale y Virginia Woolf) sobre Middlemarch.

 

Friedrich Nietzsche se burló de la novela por interpretar el sufrimiento como un medio de expiar la deuda del pecado…

 

Dorothea and Will

Argumento

Dorothea Brooke se equivoca cuando decide casarse con Edward Casaubon, un erudito muchos años mayor. Casaubon se pone celoso de la amistad de Dorothea con Will Ladislaw, su primo. Casaubon muere y Dorothea descubre más tarde que su testamento contiene una disposición que exige que sea desheredada si se casa con Ladislaw. Por miedo al escándalo, Dorothea y Ladislaw inicialmente se mantienen separados. Sin embargo, finalmente se enamoran y se casan.

Durante este tiempo, se desarrolla la historia de Lydgate, médico apasionado por la medicina. Lydgate se casa con Rosamond Vincy, a quien considera "pulida, refinada y dócil". Por su parte, Rosamond cree que el matrimonio con Lydgate, de quien no se da cuenta de que es pobre, mejorará su posición social. Lydgate busca un préstamo de Nicholas Bulstrode, un banquero, pero se lo niega.

John Raffles chantajea a Bulstrode, a quien conoce de antes. Cuando Raffles enferma, Bulstrode lo atiende y envía a buscar a Lydgate. Bulstrode posteriormente ignora las instrucciones médicas de Lydgate, causando la muerte de Raffles. Cuando sale a la luz la verdadera historia sobre Bulstrode y Raffles, surgen preguntas sobre la posible participación de Lydgate en la muerte de este último. Una de las pocas personas que cree en su inocencia es Dorothea, y su compasión y bondad lo cautivan.

Opiniones

Según Henry James Middlemarch era "a la vez una de las novelas inglesas más fuertes y una de las más débiles... Middlemarch es un tesoro de detalles, pero es un todo indiferente". Entre los detalles, su mayor crítica fue el personaje de Ladislaw, quien sintió que era una figura heroica insustancial frente a Lydgate. Las escenas entre Lydgate y Rosamond las elogió especialmente por su profundidad psicológica.

El filósofo alemán Friedrich Nietzsche, que leyó Middlemarch en una traducción propiedad de su madre y su hermana, se burló de la novela por interpretar el sufrimiento como un medio de expiar la deuda del pecado, que encontró característico de las "pequeñas mujeres moralistas à la Eliot".

En siglos separados, Florence Nightingale (reformadora social) y Kate Millett (feminista) comentaron sobre la eventual subordinación de los propios sueños de Dorothea a los de su admirador, Ladislaw.

En la primera mitad del siglo XX, Middlemarch siguió provocando respuestas contrastantes. Mientras que Leslie Stephen descartó la novela en 1902, su hija Virginia Woolf la describió en 1919 como "el libro magnífico que, con todas sus imperfecciones, es una de las pocas novelas inglesas escritas para adultos".

En el siglo XXI, la novela todavía goza de gran estima. Los novelistas Martin Amis y Julian Barnes la han llamado probablemente la novela más importante en lengua inglesa, y hoy Middlemarch se incluye con frecuencia en los cursos universitarios.

Artículos relacionados

Gwendolen trata de encontrar el hombre rico que le asegure el porvenir… Daniel Deronda

… quiso escapar del estereotipo de mujeres que escribían solamente romances ligeros… George Eliot

You are just given a space to work. You are given time to work. And beyond that, no expectations are placed on you… Michael Chabon

Mandános tus sugerencias para leer y comentar.