RJ Palacio, cuyo nombre real es Raquel Jaramillo, escribió
Wonder como una especie de castigo.
Cuando compraba helados con sus hijos una tarde, en Brooklyn, vio a una chica
con una deformidad facial. Su hijo de tres años empezó a llorar por lo que
retiró a sus chicos del lugar y allí fue que se arrepintió de no haberse
quedado a conversar con la chica. Wonder provocó dos libros más: 365 Days
of Wonder: Mr. Brown´s Book of Precepts y The Julian Chapter: A Wonder Story…
- ¿Por qué no nos cuentas acerca de éste nuevo
libro?
- Esta es una especie de e-book que publiqué sobre
el curso del año pasado. Uno es contado desde el punto de Julián, el bully de Wonder, el otro desde el punto de vista
de Christopher, quien es el mejor amigo de Auggie, anterior a los eventos de Wonder, y el último desde el punto de
vista de Charlotte una de las pequeñas amigas de Auggie en Wonder, pues nunca escuchamos sus opiniones. Ellos van a mejorar Wonder pues pueden tener vida propia.
- Wonder
conmovió a tanta gente. ¿Cómo se siente tener esa influencia?
- Es increíble, mi vida dio un vuelco. Cuando
escribí Wonder ni siquiera esperaba
que se publicara. El tema no estaba de moda, no era trending topic, no se hablaba
de vampiros ni hadas y de pronto ser publicado y estar hablando del tema tres
años después, es algo más allá de lo que pudiera imaginar. Y créeme que soy muy
imaginativa. Esto ha sido asombroso.
- Inició muchas cosas, en diferentes lugares. ¿Cómo
lo tomas o solo lo dejas fluir?
- Es como que tomó vida propia. No me necesita. El
movimiento ha ido más allá de RJ Palacio o Wonder.
La idea pegó, es como un lugar para que la gente exprese cosas. No tengo nada
que hacer con esas conversaciones que se dan sobre ser bueno, que van más allá
del libro. Es como que empecé algo y fue más allá de todo lo que pudiera
imaginar.
- ¿Cuándo decidiste dejar tu trabajo?
- Escribí Wonder
hace tres años. Siempre he estado en el negocio de las publicaciones de libros y
acabo de dejar el trabajo hace dos meses. Estar en este medio te hace a la idea
que el escritor debe suplementar su oficio con un trabajo. Y luego de Wonder pensé: bueno, esto tiene que
terminar algún día, pero entre escribir otro libro y las otras actividades… pensé
que era tiempo de dejar mi trabajo.
- Bueno estoy listo para asociarme con Wonder, cuando estés lista.
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